Jesús, como vimos, es el Cordero de Dios. Él toma nuestro pecado y culpa sobre sí mismo, nos da un nuevo comienzo: arrepentirse y creer en el Evangelio. Tendremos esas mismas palabras en dos semanas y media cuando recibamos cenizas en nuestras frentes. Arrepiéntete y cree en el Evangelio.
Este domingo hacemos la pregunta: ¿Por qué debemos arrepentirnos? ¿Por qué debemos creer? ¿Por qué seguir a Jesús? Para muchas personas, Jesús es maestro moral junto con Sócrates, Confucio y el Buda. ¿Y qué? Hay miles de ellos, a lo largo de la historia e incluso en nuestro mundo moderno. ¿En que sentido es Jesús diferente?
Tenemos la respuesta hoy. Jesús tiene autoridad. Seguimos a Jesús porque él tiene autoridad. Unos doce siglos antes de Jesús, Dios prometió que levantaría un profeta como Moisés. Te acuerdas de Moisés: dio la alianza, la ley y los mandamientos. Jesús es el nuevo Moisés. Él da una nueva alianza, una nueva ley, un nuevo mandamiento. Jesús tiene autoridad.
Quizas te preguntas qué cosa es la autoridad. La palabra viene del latín "auctor" - autor, originador. Jesús tiene autoridad porque es el origen. El día de Navidad escuchamos: En el principio era la Palabra y la Palabra estaba con Dios y la Palabra era Dios ... la Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros. Jesús es el Verbo hecho carne. Como decimos, verdadero Dios y verdadero hombre.
Es por eso que Jesús puede mandar a los demonios. Son criaturas hechas por Dios. Seguro que se han vuelto mal y han hecho mucho daño. Usan su libertad para oponerse a Dios. Pero finalmente son criaturas de Dios. Entonces Jesús puede decirles: "Callate y sal de él." Jesús tiene la plena autoridad de Dios. El es Dios.
Jesús se encuentra en una categoría aparte de Sócrates, Confucio, Buda o cualquier gran maestro moral. Podemos aprender de ellos y admirarlos. Estimo a Sócrates, pero no tengo una relación personal viva con él, a menos que algún día nos encontremos en la Comunión de los Santos. Lo mismo ocurre con todos los grandes maestros.
Jesús, por otro lado, nos invita este mismo día a un encuentro: para establecer una relación con él, la relación más importante que tendrás con cualquier persona.
Hoy vemos la autoridad de Jesús. Él es el autor, el creador. Él nos llama a ser discípulos misioneros. Delante de él enfrentamos una elección. En las palabras de nuestro Salmo, "Si hoy escuchas su voz, no endurezcas tu corazon". Amén.